CONFIAR es una palabra muy recurrente en mi vida. Hace unos meses una mujer-hermana me acompañó en una visualización poderosa en la que tenia que encontrarme con mi futura yo dentro de 5 o 10 años. Te cuento lo que vi…
Mi futura Yo se veía deslumbrante.
Llevaba un vestido largo color teja y botas negras; llevaba un broche de flores secas en tono amarillo y naranja con espigas color crema…su pelo trenzado era plateado y sus ojos transmitían fuerza, confianza, paz, compasión, serenidad y mucha sabiduría.
Trabajaba con pequeños grupos que venían para retiros en la Casita del Corazón y le encantaba cuidar en todo detalle la estancia de las personas que llegaban y se hospedaban en Las Casitas del Poeta. En su tiempo libre meditaba, se bañaba en el mar, hablaba con los árboles del bosque, estudiaba ruso y pintaba. Vivía en el Valle encima de una playacsalvaje con su compañero.
Se la veía plena y feliz. Era la encarnación del merecimiento.
Me regalaba un broche y me lo colocaba sobre el corazón, mientras me dicía estas palabras: <<…es para sanar esa herida abierta que tienes ahora…Perdona y perdónate para estar en Paz.>>
Fue un encuentro muy rico, me vi fuerte, serena y en paz. El mensaje que me dio al final fue:
CONFIA. DEJA DE CORRER.DEJA DE ESPERAR.
Y me daba un sello para grabar e integrar en mi esa palabra

Esa misma noche, después del viaje a mi futuro, decidí que al día siguiente iría a por ese broche. Me encontraba, en ese entonces, en Palma de Mallora y sabía de una tienda con encanto donde podría conseguir hacerlo realidad. A la mañana siguiente, ese mismo broche que había visualizado con todo detalle, florecía sobre mi corazón!
Y me dije: CONFÍA

Arianna Ottolina
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